Algunas recomendaciones clave para asegurar una alimentación infantil saludable

La alimentación infantil es fundamental para el crecimiento y desarrollo saludable de los niños. Por eso, es vital adaptar las pautas alimentarias a sus necesidades individuales. Al igual que los adultos, los niños deben consumir alimentos y bebidas llenos de nutrientes y solo las calorías necesarias para sus actividades diarias.
Las Pautas dietéticas para estadounidenses 2020-2025 sugieren equilibrar las calorías consumidas con la actividad física. Estas guías también recomiendan mejorar los hábitos alimenticios para promover la salud, reducir el riesgo de enfermedades y evitar el sobrepeso y la obesidad.
Recomendaciones para una alimentación saludable
Para los niños de 2 años en adelante, se recomienda una variedad de alimentos y bebidas saludables:
Frutas y verduras: Nutrientes esenciales y vitaminas.
Nueces y semillas sin sal: Solo si el niño no es alérgico.
Cereales integrales: Fuente de fibra y energía.
Productos lácteos bajos en grasa: Leche, yogur y queso.
Alimentos con proteínas: Mariscos, carnes magras, aves, huevos, legumbres, nueces, semillas y productos de soya.
Iniciativas para una alimentación sostenible
La Alianza Global para la Alimentación Saludable y el Consenso de Cuenca proponen transformar los sistemas alimentarios para proteger a las futuras generaciones. Algunas de las recomendaciones incluyen:
Guías alimentarias sostenibles: Adaptadas culturalmente y accesibles.
Educación alimentaria en escuelas: Reducir productos dañinos y fomentar los saludables.
Transformación de entornos: Proteger la salud restringiendo alimentos no saludables.
Regulaciones de productos ultraprocesados: Impuestos y etiquetado frontal de advertencia.
Programas sociales con alimentos naturales: Cumplir con estándares nutricionales.
Agua potable segura y gratuita: En hogares, escuelas y espacios públicos.
Inversión en comedores escolares: Alimentación saludable en comunidades.
Atención prenatal y consejería alimentaria: Prevenir y tratar la mala nutrición.
Blindaje de conflictos de interés: Excluir a corporaciones alimentarias en políticas alimentarias.
Investigación y monitoreo: Datos sobre salud y nutrición infantil.
Llamado a la acción
Es crucial que la sociedad civil, academia, organismos internacionales, profesionales de la salud, padres y la población en general colaboren en pro de la alimentación infantil saludable. Según el Instituto Nacional de Salud Pública, quienes se adhieran al consenso de Cuenca deben:
Exhortar y colaborar con gobiernos: Implementar las recomendaciones a través de planes de acción.
Monitorear y evaluar esfuerzos: Identificar intervenciones efectivas.
Actuar sin conflicto de interés: Evitar asociarse con productos ultraprocesados.
Fuente: Maya Comunicación