Las mascotas, más que un regalo: una decisión para toda la vida

Cada Día del Amor y la Amistad la economía se reactiva ante lo popular de la fecha. En ese contexto, hay quienes acostumbran demostrar su afecto con algún presente, cuyo valor está relacionado con el aspecto sentimental. Sin embargo, hay un “regalo” que nunca debería estar en la lista: las mascotas. Aunque algunas personas las consideran una opción atractiva, es una decisión que debe tomarse con plena conciencia y responsabilidad.
El Dr. Fausto Reyes Delgado, Director Médico del Hospital Veterinario UNAM-Banfield, aconseja que antes de decidir agregar un cachorro canino o felino al hogar, se deben considerar diversos factores para prevenir que ese regalo “sorpresa” termine en abandono.
“Hay que tomar en cuenta que antes de incorporar una mascota a un núcleo familiar, se debe realizar una visita al médico veterinario y tener una conversación extensa con él. El especialista puede orientar al futuro dueño sobre cuál es el animal más adecuado según las capacidades económicas, sociales y del tiempo disponible del futuro tutor”, señala.
Si esta reflexión no se lleva a cabo, el riesgo de abandono aumenta. Quien recibe una mascota como “sorpresa” puede no estar preparado para el compromiso que implica.
“Hablamos desde acciones básicas, como proporcionarle alimento dos o tres veces al día, según sus necesidades, hasta cuidados más específicos, como baños especiales para ciertas razas de cachorros, mantener al día su esquema de vacunación y desparasitación, y llevarlo al menos dos veces al año a revisión médica para asegurarnos de que esté sano. Además, este compromiso, ya sea con un perro o un gato, implica una responsabilidad de al menos 10 años de convivencia, atenciones y mucho amor.”, explica el Médico Veterinario.
En el caso específico, cuando un animal de compañía es obsequiado en el contexto de una relación de pareja, existe la posibilidad de una ruptura. En esos casos, algunas personas buscan deshacerse de todo aquello que les recuerde a la relación fallida. Aunque no es la norma, muchos perros y gatos pueden terminar abandonados, sin esterilizar y expuestos a los peligros de la calle.
A esto se suman las emergencias médicas que pueden presentarse a lo largo de la vida del ejemplar. “Antes de incorporar a un perro o gato a nuestra vida, es fundamental informarnos y asumir la responsabilidad que conlleva. La tenencia responsable comienza desde el primer día”, concluye el especialista del Hospital Veterinario UNAM-Banfield.